Aunque la mayoría de las familias desean lo mejor para sus hijos, muchas enfrentan circunstancias, que salen de su control y que afectan la capacidad de educar y desarrollar integralmente a sus hijos.
Que los niños de 6 a 11 años alcancen un óptimo desarrollo (físico, cognitivo y emocional), en la etapa crucial que es la preadolescencia, para que culminen la educación básica media e ingresen aptos a la básica superior (8° grado). Para ello, favorecemos espacios que estimulen su curiosidad, autonomía, trabajo en equipo y manejo de conflictos como el apoyo al estudio y talleres extracurriculares.
Además, buscamos que los padres tengan las habilidades parentales necesarias (escucha activa y empática, promoción del interés, la curiosidad y autonomía de los niños) para garantizar el desarrollo integral de sus hijos.
Acompañamos diariamente a un grupo de niños vulnerables de 6 a 11 años, que son seleccionados según sus necesidades particulares.
Les ofrecemos apoyo escolar para fortalecer su aprendizaje, alimentación nutritiva que contribuye a su desarrollo y actividades recreativas diseñadas para estimular su creatividad, autoestima y habilidades sociales.
En este espacio, los niños tienen la oportunidad de descubrir sus talentos y habilidades, adquirir nuevos conocimientos y socializar con otros de su edad. Cada semana, pueden participar en nuestros talleres extracurriculares de:
-Cocina
-Arte
-Expresión corporal
-Caligrafía
Encuentros mensuales con 12 a 15 padres, donde abordamos temas clave como educación, resiliencia, afectividad, trabajo y economía doméstica.
En estos espacios comparten experiencias, aprenden a escuchar, a expresarse y a fortalecer sus habilidades parentales, fomentando la confianza y relaciones positivas con otros.